Las relaciones públicas o PR, como es también conocido, es el puente entre la empresa y sus stakeholders, por lo que es importante trabajar en mantener una constante imagen positiva. Desafío importante en un mundo ultra conectado y en el que prima la inmediatez.
Como bien sabemos, en todo trabajo de relaciones públicas, la constancia es la clave, para mantener al público fidelizado en cada una de las acciones que la empresa o institución esté llevando a cabo.
Por esto, te presentamos distintos puntos a considerar para una estrategia de relaciones públicas sólida y sostenible en el tiempo:
Definir reglas claras en la estrategia: Lo primero es lo primero. Una estrategia debe ser clara y con objetivos a corto, mediano y largo plazo. La planificación es clave, ya que permite el uso eficiente de los recursos disponibles, brindando una guía para los eventos futuros.
Reconocimiento de la audiencia: Entender cuáles son las virtudes y dolores de nuestras audiencias, es un elemento basal para la elaboración de una buena estrategia de relaciones públicas. En esto, La comprensión profunda de los stakeholders es fundamental, para encausar de la mejor forma el trabajo a realizar. En esto, es importante realizar análisis de las preferencias, conocer sus valores, comportamientos, etc. Para conectar los mensajes de forma efectiva.
Claridad en la comunicación: Ser coherente es importante. Para construir bases sólidas tanto a nivel discursivo o de imagen, hay que unificar las voces en pilares determinados que, al ser escuchados, tengan una identificación inmediata desde la opinión pública con la empresa o institución.
Las personas suelen criticar las volteretas discursivas o cuando las personas borran con el codo lo que anteriormente escribieron con la mano. Por esto, hay que identificar los pilares comunicativos, pulirlos y que estos sean los que permitirán navegar las tormentas comunicacionales en distintos frentes, casi como mantras.
Utilizar los medios digitales: Esta es la era digital, por lo que ya no es un commodity, sino un must, el saber aprovechar todo el potencial que las plataformas en línea ofrecen hoy en día. Unificar los esfuerzos de relaciones públicas en medios masivos, junto al contenido de blogs y sitios web, son acciones que se retroalimentan, y que, además, permiten la interacción del público, uno de los elementos más atractivos al poder ser ellos parte de las conversaciones propuestas por la marca.
Evaluación constante: Establecer períodos para hacer las mediciones dentro de las estrategias es esencial, puesto que permite generar las adaptaciones necesarias o cambios en caso de que sea necesario. Las evaluaciones permiten medir la eficacia de las medidas, habiendo desde el inicio, establecido los mecanismos para realizar las mismas.
Esto no se trata de destruir todo si es que algo no salió como se esperaba. Sino que es tener la capacidad de corregir en los momentos precisos para una consecución satisfactoria de los resultados. Tener una estructura sólida de trabajo, es similar a tener un mapa de navegación para sortear con éxito las marejadas que puedan generarse, siendo más eficiente el camino a transitar durante el período de trabajo.
En resumen, establecer estrategias eficientes para las relaciones públicas es fundamental dentro de lo que es la construcción de una imagen corporativa sólida y persistente en el tiempo, sin dobles lecturas. La correcta combinación de todos los puntos emitidos, conforman el marco para alcanzar el éxito en este campo.
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